Categoría: Errores frecuentes

  • Errores típicos al empezar a hablar gallego (y cómo evitarlos)

    Errores típicos al empezar a hablar gallego (y cómo evitarlos)

    Empezar a hablar gallego puede ser más fácil de lo que imaginas, pero también es normal cometer errores al principio.

    La cercanía entre gallego y castellano es una ventaja, pero también puede llevarte por mal camino si no conoces las diferencias clave.

    Conocer los errores más frecuentes te ayudará a evitarlos y a sonar más natural desde el inicio.

    Por qué es tan fácil equivocarse al principio

    El gallego y el castellano comparten la misma familia lingüística y muchas estructuras similares.

    Esta proximidad crea una sensación de familiaridad que puede engañarte. Piensas que puedes traducir directamente del castellano, pero no siempre funciona así.

    Cada idioma tiene sus propias reglas, vocabulario específico y expresiones únicas.

    La buena noticia es que estos errores son predecibles y, por tanto, evitables.

    Error 1: falsos amigos que te confunden

    Algunas palabras se escriben o suenan similar en ambos idiomas, pero significan cosas completamente diferentes.

    Ejemplos de falsos amigos frecuentes:

    • «Rato» – En castellano significa «tiempo», en gallego significa «ratón». Para tiempo usa intre, bocado o momento
    • «Escoba» – No es «escoba», sino vasoira
    • «Borrar» – No es «borrar», sino eliminar o apagar
    • «Reparar» – En gallego significa «darse cuenta», no «arreglar» (que sería arranxar)
    • «Tirar» – En gallego significa «quitar» o «sacar», no «lanzar» (que sería lanzar)

    La solución es consultar un diccionario cuando tengas dudas, no asumir que las palabras son iguales.

    Error 2: traducir expresiones palabra por palabra

    Este es uno de los errores más comunes. Intentas traducir frases hechas del castellano directamente al gallego y el resultado suena artificial.

    Ejemplos de traducciones incorrectas:

    • Mal: «Echar de menos» → Bien: Botar en falta
    • Mal: «Dar igual» → Bien: Dar o mesmo
    • Mal: «Tener que ver» → Bien: Ter que ver (en este caso sí coincide, pero no siempre)
    • Mal: «Llamar la atención» → Bien: Chamar a atención

    Cada idioma tiene sus propias expresiones idiomáticas. Aprende las expresiones gallegas auténticas en lugar de inventar traducciones.

    Error 3: usar tiempos verbales inexistentes

    Muchos hispanohablantes intentan crear tiempos compuestos en gallego como los del castellano.

    El gallego no tiene tiempos compuestos como «he comido» o «había estudiado».

    Ejemplos de errores comunes:

    • Mal: «Hoxe he comido pizza»
    • Bien: «Hoxe comín pizza»
    • Mal: «Tenía estudiado moito»
    • Bien: «Estudiei moito» o «Estudiara moito»

    Usa los tiempos simples del gallego: presente, pretérito perfecto simple, imperfecto, futuro, etc.

    Error 4: colocación incorrecta de pronombres

    Los pronombres átonos en gallego tienen reglas de colocación diferentes al castellano.

    Este es un área complicada, pero hay algunos patrones básicos:

    • Mal: «Te quero»
    • Bien: «Quérote»
    • Mal: «Me gusta»
    • Bien: «Gústame»
    • Mal: «Lo voy a hacer»
    • Bien: «Vouno facer»

    En general, en gallego los pronombres tienden a colocarse después del verbo (enclíticos) en más situaciones que en castellano.

    Error 5: pronunciación influenciada por el castellano

    El gallego tiene sonidos que no existen en castellano. Mantener la pronunciación del castellano hace que no suenes auténtico.

    Sonidos clave que debes practicar:

    • Las vocales abiertas y cerradas: médo (miedo) vs medo (dedo)
    • La «x» gallega: suena como «sh»: xente (gente)
    • La «ñ» vs «nh»: algunos hablantes distinguen camiño y camiño
    • Las consonantes geminadas: villa no se pronuncia igual que vila

    Escucha gallego autentico para acostumbrarte a estos sonidos.

    Error 6: usar calcos sintácticos del castellano

    Algunas estructuras gramaticales son diferentes en gallego.

    Ejemplos de calcos que debes evitar:

    • Mal: «Vou a facer» (calco de «voy a hacer»)
    • Bien: «Vou facer»
    • Mal: «Estou a comer»
    • Bien: «Estou comendo»

    Aprende las estructuras propias del gallego en lugar de adaptarlas del castellano.

    Estrategias para evitar estos errores

    Con estos consejos prácticos reducirás significativamente tus errores:

    • Consume contenido en gallego real: prensa, radio, podcasts, series
    • Aprende expresiones completas, no palabras aisladas
    • Practica en voz alta para detectar cuando algo no suena natural
    • Pide corrección a hablantes nativos siempre que puedas
    • Usa recursos confiables: diccionarios oficiales y gramáticas reconocidas
    • Ten paciencia contigo mismo: cometer errores es parte del proceso

    Cuándo preocuparse por los errores

    Los errores son normales y esperables al principio. No todos tienen la misma importancia:

    • Errores leves: problemas de pronunciación menores, vacilaciones
    • Errores importantes: falsos amigos, estructuras incorrectas, calcos obvios

    Corrige primero los errores que afectan a la comprensión o que hacen que suenes muy artificial.

    Preguntas frecuentes

    ¿Es normal cometer tantos errores al principio?

    Completamente normal. La proximidad con el castellano paradojalente aumenta ciertos tipos de errores al inicio.

    ¿Debo corregir todos mis errores inmediatamente?

    Prioriza los errores que afectan la comunicación. No te obsesiones con la perfección desde el primer día.

    ¿Cuánto tiempo tarda en disminuir la frecuencia de errores?

    Con práctica regular, en 2-3 meses notarás una mejora significativa en los errores más básicos.

    Convierte los errores en aprendizaje

    Cometer errores al empezar a hablar gallego no es un fracaso, es una parte natural del proceso.

    Los hispanohablantes tenemos ventajas únicas para aprender gallego, pero también desafíos específicos por la proximidad entre los idiomas.

    Reconocer estos errores típicos te pone un paso por delante. Ahora sabes qué vigilar y cómo evitar las trampas más comunes.

    Recuerda: cada error que corriges te acerca más a sonar como un hablante natural de gallego. Apúntate a un curso estructurado donde puedas recibir corrección profesional y evitar que los errores se conviertan en malos hábitos.

    El camino hacia la fluidez está lleno de errores que se convierten en aciertos.

  • Errores comunes en gallego para hispanohablantes

    Errores comunes en gallego para hispanohablantes

    Si eres hispanohablante y estás aprendiendo gallego, es normal cometer errores. La cercanía entre ambos idiomas ayuda a comprender mucho… pero también engaña.

    Aquí verás algunos de los fallos más frecuentes, con ejemplos claros y correcciones sencillas.

    ¿Por qué cometemos errores al hablar gallego?

    Gallego y castellano comparten muchas raíces. Esa proximidad provoca que pensemos que todo se traduce igual.

    El problema es que no siempre funciona así: hay falsos amigos, expresiones diferentes y estructuras que no coinciden.

    La buena noticia es que estos errores son fáciles de detectar y corregir si sabes cuáles son.

    Error 1: palabras que parecen iguales pero no lo son

    Un ejemplo muy claro es rato.

    • En castellano, “un rato” es un lapso de tiempo.
    • En gallego, rato significa ratón, roedor.

    Para hablar de tiempo, lo correcto sería usar palabras como bocado, intre, momento, lapso.

    Otros falsos amigos frecuentes:

    • cumpreanos → en castellano “cumpleaños”, pero se dice aniversario.
    • gafas → en gallego lo habitual es lentes ou anteollos.

    Error 2: inventar tiempos verbales que no existen

    Muchos hispanohablantes intentan trasladar al gallego los tiempos compuestos del castellano. Pero en gallego no existen tiempos compuestos como “he comido” o “había estudiado”.

    • Mal: Hoxe he comido con ela.
    • Bien: Hoxe comín con ela.

    No es un matiz estilístico. Es simplemente incorrecto.

    Error 3: traducir expresiones al pie de la letra

    Cada idioma tiene sus propias frases hechas. Traducirlas literalmente del castellano al gallego suele dar resultados absurdos.

    • Mal: a destro e sinistro
    • Bien: ao torto e ao dereito
    • Mal: subirse á parra
    • Bien: choverlle a un no tellado

    La clave está en aprender expresiones auténticas del gallego y no fiarse de las equivalencias palabra por palabra.

    Error 4: falsos amigos entre gallego y castellano

    Algunas palabras se parecen, pero significan cosas distintas.

    • Desenrolar no es “desarrollar”. En gallego significa “quitar o desenvolver un rolo” (desenrollar algo). Para decir “desarrollar un proxecto” se usa desenvolver.
    • Reparar no es “arreglar”. En gallego significa “darse cuenta, fijarse”. Ejemplo: Non reparei na túa chamada (no me di cuenta de tu llamada).

    Son trampas habituales incluso para estudiantes con buen nivel.

    Error 5: colocación de los pronombres

    Los pronombres en gallego tienen sus propias reglas. Y no siempre coinciden con las del castellano.

    Un error muy común es colocarlos como en español.

    • Mal: Te quero
    • Bien: Quérote

    Aprender bien la colocación de los pronombres es fundamental para sonar natural. Y, al principio, es normal equivocarse.

    Cómo evitar estos errores y mejorar tu gallego

    Algunos consejos prácticos para reducir fallos:

    • Consulta un buen diccionario antes de usar palabras dudosas.
    • Lee y escucha gallego real: prensa, series, podcasts.
    • Aprende expresiones propias del idioma, no traducciones literales.
    • Repite en voz alta frases correctas para interiorizar la colocación de pronombres.

    Conclusión: de los errores al aprendizaje consciente

    Los errores más comunes en gallego para hispanohablantes tienen una causa clara: la cercanía con el castellano.

    Saber detectarlos es el primer paso para evitarlos.

    Si quieres avanzar de verdad, dedica tiempo a practicar con materiales de calidad y a rodearte del idioma.

    Y si prefieres ir con más apoyo, recomendamos este curso de iniciación al CELGA 2 online, pensado para dar una base sólida y ayudarte a evitar estos fallos desde el principio.

    Cometer errores no es un problema. El problema es no aprender de ellos.